La Semana Santa 2021, en la situación de pandemia que estamos atravesando en este momento; nos invita nuevamente a mirar el pasado, a analizar el presente y a visualizar el futuro que ciertamente nos conduce a una fraternidad universal. La Semana Santa 2021, en la situación de pandemia que estamos atravesando en este momento; nos invita nuevamente a mirar el pasado, a analizar el presente y a visualizar el futuro que ciertamente nos conduce a una fraternidad universal.

Por tanto, vivir la Semana Santa en familia es acompañar a Jesús con nuestra oración, reflexión y el arrepentimiento de nuestros pecados. Además, lo importante de este tiempo no es el recordar con tristeza lo que Nuestro Señor Jesús padeció, sino entender por qué murió y resucitó. Es celebrar y revivir su entrega a la muerte por amor a nosotros y el poder de su Resurrección, que es primicia de la nuestra.

Es comprometernos desde nuestras acciones coherentes, a dar lo mejor de cada uno, fortalecer nuestra fe y esperanza por medio del amor y el servicio, ya que nuestro carisma se resume en ser signos de comunión en el mundo y se vivencia concretamente desde la fraternidad, la oración y la misión.